Aridos
Los áridos también son muy utilizados en jardinería por sus propiedades decorativas y funcionales. Los áridos para jardinería son materiales pétreos de diferentes tamaños y colores que se utilizan para cubrir el suelo y decorar jardines y paisajes. Entre los tipos de áridos más utilizados en jardinería se encuentran la grava, el canto rodado y la piedra decorativa.
Además de su valor estético, los áridos para jardinería también tienen ventajas funcionales, como la reducción de la erosión del suelo, el control de la humedad y la prevención de la aparición de malas hierbas. Al cubrir el suelo con áridos, se evita la pérdida de agua por evaporación, se reduce la compactación del suelo y se protege la superficie de las inclemencias climáticas.
Es importante tener en cuenta que la elección del tipo de árido dependerá de las características del jardín y de las plantas que se deseen cultivar. Por ejemplo, las plantas que necesitan un suelo húmedo pueden no ser adecuadas para suelos cubiertos con áridos. Por lo tanto, es recomendable consultar con un experto en jardinería para elegir el tipo de árido adecuado para cada caso.